Reseña/2022-44 Mil "Tequieros" (On the road #2) Isabel Keats

Esto no puede estar pasándole a ella. Al menos eso es lo que se repite Achu, una y otra vez, cuando su ordenada vida —una meteórica carrera en un conocido bufete de San Diego, un novio atractivo y con una buena posición económica— salta por los aires y, de pronto, se encuentra en una cabaña perdida, en mitad de una tormenta de nieve y sin otra compañía que un desconocido de ascendencia nativo americana, de pocas palabras y con los ojos azules más bonitos del mundo. 

Las cosas ya no pueden ir a peor, o... ¿quizá sí?

Cuando el destino te pone a prueba, tienes dos opciones: hundirte y llorar, o salir a flote y aprender a vivir de verdad.

«Si leíste, “Mil campanas”, no dejes escapar la oportunidad de reencontrarte con algunos de sus deliciosos personajes».

Hay historias que te llaman y que, aunque sabes que tienen que esperar por falta de tiempo, ahí van resonando, sobre todo cuando son parte de una serie y el libro que le

antecede te gustó tanto y más viniendo de una pluma que disfrutas.

Me hice la difícil, hice la cobra en dos ocasiones pero, al final, siempre volvía a lo mismo, y me di cuenta que mi fuerza de voluntad flaqueaba ante Isabel Keats y sus MIL "TEQUIEROS" . Segunda parte de la bilogía On the road, cuyos números son autoconclusivos e independientes el uno del otro. Aunque como siempre digo, hay que conocer los demás para disfrutar y más de este talento literario.

Esta vez vamos a conocer a Achu, y sí, parece que una está estornudando, pero a Azucena no le importa que se haga ese chiste malo. Tiene asumido que ese diminutivo viene con mucho amor. Y refiriéndome a ella es una snob de manual. Lo he dicho. En mi tierra le diríamos una niña fresa. Le gustan los lujos, su ropa de marca, la comodidad. Y aunque se ha tomado un tiempo para lamerse las heridas, el Antes muerta que sencilla no es para ella. Ahora, detrás de eso, tenemos a una chica sensible, que está dispuesta a escuchar,

que sí, es ambiciosa pero de sus propios logros, se ha hecho a sí misma, no le debe nada a nadie. Hija de familia, una mujer empoderada, aunque también tiene un lado frágil e inocente, sobre todo lo va a descubrir cuando le conozca a él.

Phoenix, ¡Ay este hombre! De sangre mestiza nativo americano. Ese que está en contacto real con la naturaleza. Parco en palabras, rudo por así decirlo, pero tierno a la vez. Un tipo que está dispuesto a sacar un lado salvaje y a mostrar lo fácil que es vivir, simplemente eso. De principios claros, alguien que se ha reinventado gracias a una segunda oportunidad. Un corazón que reconoce a alma gemela, la única que es para él y que hará todo por conquistarla, hasta renunciar a ella si es necesario.

El elenco francamente es maravilloso. Ya habíamos conocido a Jaime y a Lili en la historia anterior. Padres de Achu. Pues los volveremos a ver por aquí, cosa que se hace deliciosa.

Pero se van añadiendo un grupo más interesante, lo que hace florecer esta historia de un modo distinto, pero evocador.

El argumento es divertido, rico y de alguna forma enriquecedor. Y es que os digo una cosa. Aunque la primera mitad vamos a tener a nuestra pareja en la naturaleza, aprendiendo a estar comunión (Achu no pongas los ojos en blanco), también vamos a ir conociendo parte de lo que ellos son, desnudaremos el alma. Achu tiene que despertar el corazón y ver que quizá lo totalmente opuesto si es para ella. Si a eso le añadimos un poco más de integración hacia la cultura nativo américana, ya os digo que tenemos una obra llena de humanismo que te va conquistando poco a poco.

El romance a mi me gustó. Dos almas que en apariencia no tienen nada que ver, convergen en la naturaleza dejando que el corazón libre de trabas encuentre el camino.

No hay prisa, no cuando se trata de este cortejo. Habrá momentos en que te vas a partir de risa, vivir en la naturaleza nunca fue tan duro y tan... en fin, natural. Por otro lado, la rendición de los corazones, el descubrir otra forma de ver, reencontrarse con otros personajes, es que ha sido una experiencia que me dejó encantada y que me ha hecho disfrutar a lo grande de MIL TE QUIEROS

Isabel Keets, es una pluma que a mi me encanta, disfruto un montón de cada una de sus propuestas y esta no me falló. ¡Feliz lectura!