Una novela inspiradora sobre la magia de las pequeñas cosas. Con una protagonista entrañable que se meterá en el corazón de los lectores. Una obra que nos hará volver a creer en el poder transformador del amor.
Esta fábula deliciosa y positiva es una invitación a descubrir los tesoros que nos ofrece la vida. A dejar atrás esquemas que nos hacen infelices o nos hastían para abrazar otros nuevos, más emocionantes. A ver el mundo tal cual es en realidad, igual que lo veíamos en esos largos veranos de infancia en los que todo resplandecía.
Un viaje transformador a través del alma en compañía de una entrañable protagonista. Doña Maru, una anciana de noventa años, lleva una vida apacible en Oaxaca, México, donde reparte entre los niños del orfanato sus alfajores, su luz y sus sonrisas. Nunca aprendió a leer, pero destila sabiduría. Y cuando descubre que su nieto, al que nunca ha conocido, vive en Veracruz, decide montar en su bicicleta, su única posesión en el mundo, y partir en busca del joven en un viaje revelador hacia el poder de los sueños.
Con un estilo tan impecable como ágil y ameno, el escritor Gabri Ródenas ofrece a los lectores una experiencia real de autodescubrimiento y sanación para volver a recuperar la magia de la vida.
Antes de correr de cualquier cosa, antes incluso de saludaros, quiero decir que una vez más, salí de mi zona de confort y me arriesgue por un libro que ya el título decía mucho. Algo dentro de mi necesitaba leer esta historia y ya os digo que no me ha defraudado.
No soy de leer libros de autoayuda, de hecho, este no lo es. Es más bien del tipo inspiracional que al final del camino, seguro te deja con una sonrisa. Es una obra corta que me he devorado en un ratito, fui compañera de un viaje, recorrí parte de mi amado México y a la vez, viajé al lado de Doña Maru en la búsqueda más importante de su vida.
¿Has conocido a ese tipo de personas mágicas que aparecen en un parpadeo
en tu vida para darte un regalo? Esa es Doña Maru. Una mujer analfabeta con mucha sabiduría adquirida a través de los años, no sabe leer libros, pero sabe leer en los corazones. Y así LA ABUELA QUE CRUZÓ EL MUNDO EN UNA BICICLETA, va dejando tras de sí un mensaje de amor universal, de ese conocimiento trascendental en donde todo se resume a tres cosas simple: VIVE EL PRESENTE, AMA Y PERDONA, SIGUE ADELANTE.
Para mi conocer a esta mujer de la mano de Gabri Ródenas ha sido algo muy bonito. Hay mucha dulzura en esta belleza que espero le des la oportunidad, yo por mi parte disfrute de la pluma del autor, que es sencilla, directa y amena. ¡Feliz lectura!