Cuento de hadas
Leanne Banks
Contemporáneo (Princesas)
Su vida no había sido un cuento de hadas... hasta que conoció a aquel atractivo doctor.
Cuando la princesa Bridget Deveraux tuvo que reclutar médicos para su pequeño país, se encontró con un problema. El atractivo doctor Ryder McCall era la clave para conseguir lo que se había propuesto, pero, como tutor temporal de dos pequeños gemelos, estaba demasiado ocupado para ayudarla.
Para Bridget, la situación de aquel padre soltero era tan conmovedora como intensa la atracción que existía entre ambos. Ryder necesitaba encontrar una niñera. Al presentarse ella voluntaria para ayudarle a cuidar a los gemelos, Bridget sucumbió rápidamente al encanto de aquellos dos bebés... y se enamoró perdidamente de Ryder. Pero sus vidas les llevaban por caminos distintos.
Y aquí estamos de nuevo para valorar otra discreta historia publicada por Harlequin. La novelita no está mal para una tarde aburrida de domingo, se lee rápido, es ágil, pero de nuevo me repito al decir que no hay nada que no hayamos leído antes un millar de veces. Luego está eso (no sé si a vosotras os pasará) de sentir un sopor eterno cuando a la autora le da por explicar los minuciosos detalles de la rutina diaria. A veces malgastan unas cuantas páginas en describir cosas irrelevantes, que ni te tocan el corazón, ni te provocan nada más que tedio.
Los protagonistas son normalitos, ella es una princesa que no tiene muy claro si es responsable o alocada (a veces parecía estar leyendo sobre dos personas distintas). Hay algo que también me desagrada y que últimamente estoy encontrando mucho: Personajes perfectos. Sí, ya sé que estamos leyendo ficción y que tanto hombres como mujeres son guapísimos, sensuales, arrolladores, inteligentes, ricos (en muchos casos) y que poseen las mil y una virtudes; pero llega un momento (o al menos en mi caso fue así) en el que esperas que la gente sobre la que lees tenga cierta similitud con la vida real. Puede existir gente genéticamente perfecta, guapísima y muy inteligente, pero considero que cuando una persona es desagradable, lo es hasta el final o sufre un proceso lento de una cosa a otra. No me gusta la rapidez de los hechos, ni las extrañas evoluciones de los personajes que pasan de un extremo al otro en un minuto. En esta historia lo que más me ha rechinado ha sido precisamente la descripción absurda de detalles rutinarios y la rápida evolución de hechos más importantes como la historia de amor de los protagonistas.
Además de esto, los personajes secundarios han resultado, en mi opinión, un fracaso. Ha intentado enlazar la historia con un amor secundario que se ha quedado en algo extraño y que personalmente me ha sobrado. De nuevo, como dije en mi anterior reseña, puede que sea culpa mía y que me esté volviendo muy exigente, pero creo que en la novela corta se puede lograr emocionar y despertar tu interés tan fácilmente como una larga, (algunos de los libros de esta misma colección lo logran, para más detalles ver reseñas Nikki Logan, breve pero exquisito).
¿Os recomiendo la lectura? ¿Sinceramente? Yo compré el libro, ahora no lo haría. Es como tantas otras que seguramente habréis leído, no obstante lo dejo en vuestras manos, leed y decidid y si os apetece luego comentamos.
Puntos a favor: Ágil en su lectura, a veces se hace un poco lenta, pero en general se puede leer.
Puntos en contra: Personajes poco originales y la historia muy manida.
Mi puntuación: Un 6
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