Durante unas vacaciones en un hotel de Mallorca, Nadia y su amiga Ruth
conocen a dos chicos que ocupan la habitación contigua: Samuel y Daniel.
Para sorpresa de las chicas, uno de ellos, Samuel, resulta ser un
vecino y amigo de la infancia de Nadia. Pero las cosas se complican y al
finalizar esas vacaciones, él la ha herido y decepcionado de tal manera
que cree que nunca podrá perdonarlo.
Pero el destino se empeña en volver a cruzar sus caminos, y pronto se reencuentran de nuevo. Y por mucho que ambos estén resentidos y luchen contra la atracción que sienten el uno por el otro, las casualidades se suceden y finalmente se encuentran metidos en una relación que ni siquiera saben cómo enfocar. El carácter rencoroso de Nadia y su miedo a ser herida de nuevo amenaza con dar al traste con la frágil estabilidad de esa relación. Samuel se esfuerza, sin aparentes resultados, en demostrarle que está equivocada con él. Y cuando el destino decide dar una vuelta de tuerca más, añadiendo nuevos problemas a la ya de por sí precaria confianza entre ellos, Nadia ve como todos sus miedos le estallan en la cara. ¿Podrá perdonar a Samuel y confiar en él de una vez por todas?
Esta vez vengo con una autora que
me había llamado mucho la atención. Es verdad que he tardado en lanzarme a
leerlo, porque descubrí que el libro que he adquirido era en primera persona,
pero, antes que me digan que parezco cansina con mis quejas, tengo que decir
que he quedado fascinada con esta escritora y que seguramente la volveré a
leer.
Y es que Lucia Herrero sabe
entrar desde el inicio entre los ojos. Con una historia llena de risas, pasión,
desengaños, orgullos tontos e infinita paciencia cuando el amor es verdadero y
fuerte.
Para comenzar tengo que decir que
nos encontramos ante personajes muy reales, nada que ver con playboys
millonarios que nos dejaran el clásico cuento de la cenicienta.
Un profesor de inglés y una
tendera de una tienda de lencería son los protagonistas de este libro que me ha
sacado todos los sentimientos, y admiración por la autora que nos entrega una
historia con personas que podemos ser tú o yo.
Nadia es una mujer sexy, en
apariencia segura de sí misma, con una gran pasión, fuerza en su carácter,
decidida, y con una moral muy clara. Lo peor que puede tolerar es el engaño,
razón por la cual puede perder la total fe en cualquiera, como contraparte es
rencorosa y orgullosa, a veces creo que es obtusa, pero me recuerda en ocasiones
incluso a mí misma. Ya que en el fondo lo único que tiene es una gran
inseguridad y miedo a ser herida, y claro de amar.
Por su parte Samuel, madre mia,
YO QUIERO UN SAMUEL POR FAVIURS. Es un hombre integro y cabal. Acepta cuando se
equivoca y disfruta buscando picar a la mujer que le ha robado el corazón, quizá
desde su más tierna infancia. Un hombre paciente, que sabe amar y entregarse,
capaz de luchar hasta el final por la mujer que le ha robado el corazón, y
pasional viril y sexy como el pecado.
Esta historia me ha encantado
porque tiene muchos entresijos. Ambos personajes se conocieron cuando niños,
siendo los mejores amigos, y el destino una y otra vez se empeña en hacerlos
encontrarse una vez ya adultos, terminando unidos por la pasión mas descarnada.
Nadia no le pondrá nada fácil las
cosas a Samuel, pero este hombre nos gana una y otra vez con su dulzura.
Tengo que mencionar a Ruth la
mejor amiga de Nadia, una mujer segura de sí misma, sexy y con la palabra sabia
en la boca. Al pendiente y fiel a su amistad junto con las otras mosqueteras
que no dudan en estar mostrando el apoyo cuando se necesite Elena y Valeria.
Aunque también Daniel el mejor amigo de Samuel no tiene desperdicio.
La historia a pesar de ser
narrada en primera persona, hizo que sintiera que estaba sentada con la misma
Nadia tomando un café, mientras me contaba cada uno de los sucesos.
Lucia Herrero ha logrado engatusarme
desde el inicio hasta el final, sin notar para nada que esta forma de escrita
me cansara. La he disfrutado como enana y sobre todo me he enamorado de esta
pareja, porque la dulce rendición es sublime y hermosa.
¿recomendable? NO LO PODEIS
IMAGINAR, IR A POR EL
Mil gracias, guapa. Me alegro de que lo disfrutaras. ¡Besos!
ResponderEliminar