Elliott Wallace, el irresistible vizconde Lyngate, es el nuevo tutor de Stephen Huxtable, el joven duque de Merton.
Entre los Huxtable, Elliott ve la
posibilidad de medrar, y todo parece a punto para su matrimonio con
Margaret, la hermana mayor de Stephen, cuando la hermana mediana,
Vanessa, se propone por sorpresa como esposa para el vizconde.
En la noche de bodas Elliott y Vanessa
descubren sorprendidos que están hechos el uno para el otro; aunque al
tiempo se va desvelando el secreto que une a Elliott con los Huxtable.
Me moría de ganas por hablar de este libro. El primero de una serie que creo que va a ser muy interesante. Descubrí por mero accidente a esta autora y tengo que deciros que me ha ganado solamente con haber leído este primero, y espero con desesperación poder continuar con ella.
Como siempre comienzo diciendo que es un histórico de la regencia, así que ya sabemos que nos encontramos con estos lores honorables, esas damas casaderas y una sociedad chismosa, que está hambrienta por las nuevas caras.
Y es así como comenzamos con este libro. Con vizconde que va a buscar a un pueblo tocado por la mano de Dios a un futuro conde. Cuatro hermanos unidos por amor y comprensión, cada uno con sus sinos y una personalidad encantadora que nos ira conquistando y llegando al corazón casi desde el inicio.
Pero como no quiero desentrañar lo que es la saga, ya que como bien sospechamos cada libro viene por cada hermano, sólo tengo que deciros que estamos ante una autora que ha dado una personalidad a cada uno de ellos tan distinta y con una historia bien cimentada.
En este nos vamos a centrar en dos personajes que de inicio me enamorado.
Eliott ese vizconde arisco que sólo quiere enseñar a su pupilo como llevar el nuevo nombramiento. Se encuentra en un gran problema cuando conoce a las hermanas que cuidan y protegen a su nuevo alumno. El que había jurado que no habría problemas, no sólo se encuentra teniendo que retrasar sus planes, sino que a partir de ese momento, tiene la necesidad de pensar en casarse inmediatamente para poder ayudar en la situación que las hermanas del futuro conde (el pupilo) tienen, y que le acarreara dolores de cabeza.
Este personaje me ha fascinado. Es agrio, frío por momentos nos parece calculador. Sufre en silencio la falta de confianza hacia los demás después de haberse sentido traicionado. Así que ha decidido que en su vida no existe el amor, ni aún casado. Por lo que el matrimonio simplemente es un mal necesario para poder tener un heredero que lo pueda sustituir en su muerte.
Un hombre que no soporta que le lleven la contraria, que todo tiene que estar estratégicamente bien definido y como él haya dispuesto. Un hombre que se descubrirá temeroso ante el descubrimiento del verdadero amor.
Por su parte Vanessa es un personaje dulce, desinteresado. Una mujer entregada a los suyos y capaz de sacrificarse en aras de la felicidad de los demás. De entre sus hermanas, en apariencia es la menos bella, sin embargo es su corazón, su forma de ser, su alegria y devoción a todo lo que ama lo que la hace sobresalir.
Es una mujer franca que dice las cosas directamente, aunque no nos equivoquemos, también es capaz de solucionar las diferencias con quien sea, y sobre todo sabe retirarse y disculparse en el momento que es necesario sin que le afecte. Una mujer que se hace querer y que seguramente las va a conquistar totalmente.
Dos personajes totalmente contrarios en todo, se van a unir por un bien común. Salvar a las otras dos hermanas y de paso dar un heredero al vizconde.
Eliott que es incapaz de amar, por momentos se siente confuso y Vanessa tiene que aprender a olvidar a confiar en ella, y sobre todo a sortear cada problema para poder conquistar el corazón más frío.
Pero aquí la cuestión no es si lo conquista, sino que en este camino espinoso, juro que me volví su mejor amiga. Llore con ella en cada momento, y me reí a cada travesura que se le presentaba, su nobleza, su entrega, su inocencia y su optimismo son los ingredientes para tenerla como nuestra mejor amiga. Pero, también tengo que decir que este hombre en apariencia frío va a hacernos latir y suspirar en el momento que se da cuenta que daría todo por conseguir una sonrisa para él.
La pluma de la autora es muy sencilla, esta muy bien documentada y nos atrae desde la primera página. Son además las escenas íntimas dulces, elegantes y tan bien trabajadas que casi podríamos vivírlas y por supuesto nos quedamos con ganas de mucho mas.
¿Recomiendo esta obra? Totalmente, creo que la van a disfrutar y van a encontrar una impoluta obra, bien hecha, bien documentada y sobre todo muy romántica que puede enamorarlas desde el inicio.
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